En este diseño, el negro se apodera de la silueta del Arai, para dar lugar a una serie intensa de contrastes; propuesta mediante la incorporación mayoritaria de naranja - esencialmente en la zona frontal-superior -, amarillo y verde fluo. Para tratar de atenuar ese efecto de contraste constante, se incorpora una superficie importante de gris.
La elección de esta paleta de colores responde a la idea de acentuar los rasgos más importates de las formas descriptas, y que se entrelazan entre sí, dando un claro sentido de avance.
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